jueves, 11 de julio de 2013

Pasión apasionada

Pasión apasionada

Oh, chica, me enamoré de ti desde el primer momento
en que te vi, fue una sensación muy bonita, un amor muy lento,
nos besamos juntos al lado del río, y por la noche,
sentí mariposas en la tripa, así me sentí en la noche.
Nos dimos unos besos, que nunca los olvidaré, tu eras para mi una vampiresa
que no chupaba sangre, sino que era dulce, tus labios sabían a fresa.
Desde que fuimos a un lugar relajante y me hablaste de lo feliz que eras junto a mí
me sentí mejor que nunca, yo era un humano y tu una vampiresa de por allí,
tus ojos son azules, azules de la mar, tienes aspecto humano, y renacerás,
junto a mí como mi esposa, tu cara buena me hizo pensar, y verás,
puede que te vistas como una gótica, pero sólo eres una vampiresa que se encontró
a un sencillo humano como yo que estaba perdido de amor, que por tu bello corazón sonrió
y con tu sonrisa de una chica alegre y maja, tú también amor encontraste,
y no hiciste como muchas que me rechazaron, y ten en cuenta que mi interior no es un lastre.


Iñaki Bécquer

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