A de amor
Amor, te quiero con toda mi alma, con todo mi corazón, estoy seducido
por una dama tan bella, como tú, estoy obsesionado, por ti todas las noches cavilo,
tu cabello lacio es atractivo para mis ojos castaños y yo rendido
ante tu preciosidad no tengo palabras, por ti navegaría por el largo río Nilo
para salvarte de la tierra hostil porqué quieren que caigas en su cebo
para encerrarte en el castillo de Segismundo y que no veas de puertas a fuera.
Amor, por favor, seré fiel a mi palabra, hasta los azules cielos te elevo,
porque no creo que vea bellas féminas como tú, ni aunque me muera.
Es indudable, yo siempre te quiero, porqué el amor es ciego,
y yo me ciego cuándo te observo, porqué no hay nadie más bonita que tú.
Nunca te atacaré, siempre te defenderé, porque yo nunca niego
nada contra tu persona, porque para mi eres la luz.
Me alumbras el día, pero por la noche eres aun más hermosa
y no sabes lo que te amo y te adoro, eres magnánima.
Uno de mis menesteres es tenerte entre mi corazón, preciosa,
te necesito porque sino yo me muero y me quedo sin ánima.
Y yo te expreso mi amor a través de esta bella oda,
y ojalá, algún día, nos casemos en nuestra boda.
Iñaki Bécquer
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